miércoles, 18 de abril de 2007

Olores a verduras verdes, frescas, abundan en mi cocina.

No hay nada más sabroso que un lindo tomate dulce. Rojo y dulce.

Son los del fondo. Todos los conocemos.

Sólo tengo fruta fresca. Está bien. Nada más necesito.
Es el atardecer. La señora no se quiere ir a su casa. Le gusta mirar el mar...
 

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